Blake Lively vs Justin Baldoni: El Escándalo Legal que Paraliza Hollywood y Expone las Sombras de la Industria

La batalla legal entre Blake Lively y Justin Baldoni por la película “Romper el Círculo” (It Ends with Us) se ha convertido en el escándalo más explosivo de Hollywood en 2025, revelando las dinámicas de poder, manipulación mediática y acoso que siguen prevaleciendo en la industria del cine. Con demandas que superan los 500 millones de dólares en juego y acusaciones que van desde acoso sexual hasta campañas de difamación orquestadas, este caso está redefiniendo las conversaciones sobre responsabilidad, consentimiento y conducta profesional en los sets de filmación.​

El Origen del Conflicto: De Romance en Pantalla a Guerra Legal

Todo comenzó con “Romper el Círculo”, la adaptación cinematográfica de la exitosa novela de Colleen Hoover que llegó a los cines en agosto de 2024. La película, que aborda temas sensibles como la violencia doméstica, fue dirigida y protagonizada por Justin Baldoni junto a Blake Lively. Sin embargo, lo que parecía una colaboración profesional entre dos estrellas de Hollywood se transformó en una de las disputas legales más complejas y mediáticas de la década.​

En diciembre de 2024, Blake Lively presentó una denuncia ante el California Civil Rights Department alegando que Baldoni la había sometido a acoso sexual, conductas inapropiadas y represalias durante el rodaje. Según la actriz, el ambiente de trabajo se volvió hostil, con entradas no autorizadas a su tráiler e improvisaciones de escenas íntimas que no estaban contempladas en el guion original. La demanda detalla que Lively solicitó requisitos específicos durante la producción, incluyendo “no añadir más escenas de sexo, sexo oral o clímax en cámara fuera del alcance del guion que Lively aprobó cuando aceptó el proyecto”.​

La Contraofensiva: 400 Millones de Dólares en Juego

Justin Baldoni no tardó en responder. En enero de 2025, el actor y director presentó una contrademanda por 400 millones de dólares contra Lively, su esposo Ryan Reynolds y la publicista Leslie Sloane, alegando difamación, extorsión e invasión de privacidad. Baldoni sostiene que Lively amenazó con retirarse de la producción y presentar falsas denuncias de acoso sexual para obtener control creativo sobre la película.​

El abogado de Baldoni, Bryan Freedman, declaró que las acusaciones de Lively eran “falsas, escandalosas e intencionadamente salaces con intención de hacer daño público”, añadiendo que la actriz había causado problemas durante el rodaje al amenazar con no presentarse en el set ni promocionar la película. Según la defensa de Baldoni, esto llevó a que Lively fuera responsable del “desprestigio durante el estreno” de la cinta.​

El Papel de las Redes Sociales y la Manipulación Mediática

Uno de los aspectos más fascinantes y perturbadores del caso es la acusación de campañas de difamación orquestadas a través de medios y redes sociales. Lively afirma en su demanda que Baldoni y su equipo de relaciones públicas organizaron un “sofisticado plan para socavar su reputación” como represalia por hablar sobre la supuesta mala conducta en el set.​

La defensa de Lively sostiene que la actriz perdió 161 millones de dólares como consecuencia de esta campaña de difamación, que incluyó filtraciones estratégicas y manipulación mediática. Más alarmante aún, en octubre de 2025 se presentaron nuevas pruebas acusando a Baldoni y su equipo de haber borrado deliberadamente mensajes y grabaciones que podrían demostrar la existencia de esta campaña. Según el documento presentado ante el tribunal, los implicados usaron aplicaciones con mensajes autoeliminables, como Signal, para ocultar pruebas que el tribunal había ordenado preservar.​

Consecuencias Profesionales y Reputacionales

El impacto del escándalo ha sido devastador para ambas partes. La agencia de talentos WME, que representaba a Baldoni, terminó su contrato con el actor apenas un día después de que Lively presentara su demanda en diciembre de 2024. Es importante destacar que WME también representa a Lively y a Ryan Reynolds, lo que añade una capa adicional de complejidad al conflicto.​

Baldoni también vio rescindido el premio Voices in Solidarity que había recibido por ser un “aliado de las mujeres”. La organización Vital Voices declaró que las acusaciones, que “alegan una conducta abominable”, contradecían “los valores de Voces Vitales”.​

Por su parte, Blake Lively ha enfrentado críticas públicas intensas. Durante la promoción de la película en 2024, las redes sociales se llenaron de comentarios negativos hacia la actriz por su actitud en alfombras rojas, proyecciones y entrevistas, donde parecía promocionar más sus propios productos (línea de cuidado capilar, marca de bebidas alcohólicas) y la película de su esposo “Deadpool y Wolverine” que la propia “Romper el Círculo”.​

Los Desarrollos Legales: Victorias y Derrotas

En junio de 2025, el juez Liman desestimó la mayoría de los cargos de la contrademanda de Baldoni por 400 millones de dólares, dejando abierta solo la posibilidad de reclamos menores por interferencia contractual. Esta fue una victoria significativa para Lively en el ámbito legal, aunque la batalla está lejos de terminar.​

Sin embargo, en noviembre de 2025, surgieron nuevas complicaciones cuando Baldoni demandó al periódico The New York Times por 250 millones de dólares por la cobertura del caso, alegando que el medio contribuyó a “destruir” su reputación y carrera.​

Implicaciones para la Industria: El Nuevo #MeToo

Este caso resuena con especial fuerza en una industria que aún está procesando las consecuencias del movimiento #MeToo. La batalla Lively-Baldoni expone varias problemáticas sistémicas:

1. Dinámicas de poder en sets de filmación: Cuando el director es también el protagonista masculino, como en este caso, las líneas de autoridad pueden volverse problemáticas, especialmente en escenas íntimas.​

2. Manipulación mediática profesionalizada: Las acusaciones de campañas de relaciones públicas diseñadas específicamente para destruir reputaciones revelan el lado oscuro de la gestión de crisis en Hollywood.​

3. La dificultad de probar la verdad: Con mensajes eliminados, aplicaciones encriptadas y declaraciones contradictorias, el caso ilustra lo difícil que es establecer los hechos en disputas donde ambas partes tienen recursos para contratar los mejores abogados.​

4. El costo económico del escándalo: Con cifras que superan los 500 millones de dólares entre demandas y pérdidas alegadas, el caso demuestra que las controversias en Hollywood pueden tener consecuencias financieras devastadoras.​

La Posición de Colleen Hoover

En un giro reciente, Colleen Hoover, autora de la novela original, rompió su silencio en noviembre 2025 sobre la demanda. Tras las especulaciones sobre la tensión entre los coprotagonistas, Hoover se ha mantenido cautelosa, aunque su posicionamiento podría ser crucial dado que Baldoni compró los derechos del libro para hacer la película. La escritora enfrenta la difícil posición de ver cómo su obra, que trata sobre violencia doméstica y empoderamiento, se ha convertido en el epicentro de un escándalo que contradice sus propios mensajes.